Mamá: ¡no te vayas!...

Es difícil tan sólo imaginar que la persona más importante en tu vida pueda irse.
Miles de recuerdos vienen a mi mente, mi niñez y cómo mi madre me enseñaba a vivir.
Peleas y llanto, cuando el espíritu de rebeldía empezaba a invadir mi adolescencia.
Admiración hacia ella.
Sólo nosotros, tus hijos, sabemos por todo lo que tuvimos que pasar, y sin tí no lo hubiésemos logrado...
Siempre con la frente en alto, supiste enfrentar todas las adversidades.
Eres tan importante para mí...
Creo que si me dejas, nunca dejaré de llorar...
¿Porqué la vida es así?...
¿Porqué tiene que llegar la muerte?...
Talvez para tí será el descanso eterno a todas tus batallas, pero ¿qué queda para mí?, sólo sufrir por tu partida...sólo vivir
No quiero que estés tan lejos, quiero tu calor...
Se hace tan difícil, que me cuesta respirar de sólo pensar...
Sin tí, mi futuro es tan incierto, no sé que haré.
No quiero verte partir, quiero verte luchar contra ésta última batalla. Sí, lo sé, es la última.
Sé que ésta no es cualquier lucha, ésta es la batalla de la vida o la muerte.
Pero, para fortalecerte, sólo debes recordar los ojitos del diego pidiendo auxilio, diciendo: ¡mamá, yo te necesito!.
Qué cruel ha sido la vida con nosotros, contigo más que nada...
¿Porqué ya no la dejas tranquila, destino cruel?...
Te amo mamita, yo también voy a luchar por nosotros. Si te vas, estarás orgullosa de mí, si te quedas lo estarás de todas formas.
Quiero tantas cosas...
Quiero que me veas triunfar, quiero que veas a mis hijitos...
Mamá, si no te has dado cuenta, yo siempre he estado contigo, amándote. A pesar de las peleas, de todo lo malo...siempre he estado ahí...
Y, ¿sabes qué?, siempre lo estaré...porque soy parte de tí, porque soy tu hija, porque de todo lo que amo, eres tú lo mas importante y grande que tengo...
Siempre están las esperanzas...no dejaré de creer que vivirás por siempre, y así será, aunque te vayas, vivirás por siempre en nosotros...creo que mil te amo, no son suficientes para expresarte mi amor.
Sólo queda esperar la decisión del destino, sólo hay dos alternativas: vida o muerte...
Sea cual sea el destino, quiero que sepas que aunque el tiempo nos aleje...siempre estarás en mi, porque éste amor no puede morir...no tiene principio ni fin...

"Más allá de lo imposible, es mi alma que te dice: te amaré..."

La felicidad tan esperada...

Antes de subir a las nubes y viajar cada noche, mis pensamientos se concentran en la vida. Si, la vida. Ésa misma que algunas veces te eleva hacia la plenitud, pero que luego de un tiempo te deja caer bruscamente en la desgracia.

Siempre pienso que me queda tanto por vivir. Tantas metas que de pronto y a una cierta edad quiero ver cumplidas. Mis hijos...como serán mis hijos?.

Creo que a veces me doy pena. Porque soy una mujer joven, con todo un destino por delante, pero con tan pocas ganas de vivir...

Pero finalmente pienso en la vida, en el destino del hombre. Y es ahi donde imagino que a veces ella misma, ésta sabia y hermosa vida, no siempre nos va a traer desgracias. Talvez me espera la gran felicidad, eso que todos anhelamos y la razón por la cual luchamos cada día.

Ésa es mi gran esperanza. Ser feliz.

Hoy me preguntaron:

>Marcela, ¿qué te hace feliz?.

Y yo respondi:

>nada.

Fue ahi entonces cuando pensé que estaba mal. Que no podía seguir asi. Y la verdad de todo es que en éste momento de mi vida, nada me hace feliz. Claro, una que otra cosa me hace sonreir y estar bien a ratos. Pero luego vuelvo a lo mismo, siempre volver a lo mismo...

Quiero tener esperanzas , quiero ser tan feliz.
Gritar a carcajadas. Dar vueltas mirando al cielo, sin dejar de pensar en que soy feliz y que nada ni nadie puede derrumbar aquella fortaleza de dicha y plenitud.

Poder verte en una nube que pasa por mi ventana y luego mirar a mi lado derecho y ver el mismo tierno rostro, porque eres tú que me acompañas cada día de mi vida y hasta el final.

Creer. Vivir. Amar. Soñar. Reir.
Es todo lo que quiero.

No quiero seguir escondiendome y nunca poder encontrarme.

Las puertas del destino se elevan a lo alto

Te veo subir por una escalera de luz hacia el cielo.
¿Será cierto todo lo que dicen?. ¿Existirá un mundo donde reine la paz y el amor?.

Viniste corriendo a mi encuentro. Brincaste y me abrazaste muy fuerte.

Lo sé. Tu alma infinitamente bondadosa y pura logró perdonarme.

Te abrazo aún más fuerte y digo:

-Te amo.

Así pude ver nuevamente brotar una sonrisa. De pronto pude ver en ella el cielo abriendose ante mí.
Luego te miré a los ojos. Me detuve bien a verlos. Estaba viendolo directamente a él.

Me extendiste tu mano, una blanca paloma.
La tomé.
De pronto comenzamos a elevarnos en la inmensidad.
Todo era hermoso, sentía una paz incomparable.

Así, de un momento a otro, escucho tu voz angelical que me dice:

-Marce, ahora puedes quedarte conmigo.

Mi corazón se quería rendir. Una lágrima recorría mi mejilla.
¿Será que alfin podré alcanzar la felicidad junto a mi hermana?.

Parecía ser cierto. El destino cruel nunca más te separaría de mi lado.

Te tomé. Te apegué fuerte contra mi pecho y te dije:

-Estaré contigo hasta el final de los días.

Desde mi cielo

En cada mínimo detalle te siento junto a mí. Ahora estás a mi lado derecho, acompañandome y viendo todo lo que hago, lo que escribo,lo que pienso.

Tal vez por tu mente se cruza una pregunta:

>¿Qué estás haciendo Marce?, yo respondo:

>Escribo para tí, yo soy quien te quiere y piensa a cada segundo en tí.

De momento sólo puedo hablar contigo de ésta forma. Pero, sé que el día en que hablemos nuevamente no está lejano.
Ahora sólo escucho tu voz en los preciados recuerdos que me haz dejado. Tu sonrisa, tus carcajadas que se unían a las mías en búsqueda de la felicidad, que nunca nos dimos cuenta que nos sobraba y que hoy estoy segura de no tener. Aún así me haz dejado las más grandes esperanzas y deseos de vivir la vida en todo su esplendor.

La vida es hermosa, ¿cómo no disfrutarla?...

Hoy sé que existen altos y bajos. Unos muy altos y otros demasiado bajos. Pero, todas las experiencias y hechos que van ocurriendo, te enseñan a fortalecer tu espíritu, tu alma y así estar preparada para todo.

Entusiasta saltando y corriendo te guardo en el sitio más amplio de mi corazón.

Me gustaría viajar todas las noches tomada a tu mano y recorrer las nubes contigo. Algunos días sucede, otros no.
Cuando abro los ojos por la mañana y tengo esa inmensa sensación de felicidad es porque sé que estuviste junto a mí en mis sueños.

Hermana te agradezco todo. Hoy soy otra persona y todo te lo debo a tí...

Te amo y eso debes de saberlo.